Cuando nos acercamos a la Catedral de Toledo, no podemos dejar de contaros la historia de la Campana Gorda de Toledo. Se trata de la campana más famosa de la ciudad.
Vamos a detallaros algunas curiosidades de la campana gorda más famosa que, quizá, no conocías. ¡Vamos a ello!
¿Sabías que su nombre original es la Campana de san Eugenio?
La Campana fue fundida un 22 de diciembre de 1753 y su peso ¡es impresionante!: 17.744 Kg!
San Eugenio fue el primer obispo toledano. Mercedes Alonso Morales, en su libro “Campanas de la Catedral de Toledo: la Campana Gorda nos cuenta que: «el nombre de San Eugenio estaba cargado de simbolismo, que transferido a la campana, el sonido de ésta se convertía en el símbolo de la voz de San Eugenio que predicó, por primera vez el Evangelio, en Toledo».
Por ello, se pensó que ese nombre era el más adecuado para la campana mayor que convoca al pueblo a los actos litúrgicos”.
¿Quién fundió la Campana Gorda de Toledo?
El encargado de ello fue Alejandro Gargollo y Foncueba. Contaba con 47 años de edad y era de origen cántabro.
¿Cuándo se subió la Campana Gorda a la torre?
El día señalado para ello fue el 30 de septiembre de 1755.
¿Sabes dónde fue fundida la Campana Gorda?
Esto tuvo lugar en la Cuesta de San Justo. Este lugar ocupa hoy en día el número 3 y está justo al lado de la Iglesia de San Justo.
Estas casas pertenecían a la Catedral de Toledo.
El metal para su fundición fue comprado en Bilbao, aunque era importado de países de Europa Occidental y del Norte.
¿Quiénes fueron los encargados de subir la campana y cómo se hizo?
Según cuenta la tradición, los encargados fueron Marineros procedentes de Cartagena. El objetivo era colocarla en el segundo cuerpo de la torre y, el coste, fue de unos 5.000 ducados.
Se usaron maromas hechas de cáñamo para poder alzarla.
En Aranjuez se compraron 960 palos de madera para elaborar lo que se denominó “el castillejo”, que se utilizaría para ayudar a subir esta campana. Estos palos fueron transportados hasta Toledo por el río Tajo, por medio de gancheros que fueron contratados para ese fin.
Durante el día de su subida, en la Capilla de San Pedro, se expuso a la Virgen del Sagrario y al Santísimo para gozar de su protección, así como se llevó a cabo una misa cantada.
El martes 30 de septiembre de 1755 se subió la campana. Se tardaron cuatro horas y se comenzó a subir a las 6:30h de la mañana.
Una campana rodeada de muchos dichos y curiosidades
Sobre la Campana Gorda de Toledo se suele decir:
“Campana la de Toledo,
iglesia la de León,
reloj el de Benavente,
rollos los de Villalón”.
También hay otro cantar que dice:
“Tres cosas tiene Toledo
que no las tiene Madrid,
catedral, campana grande
y el puente de San Martín”
¿Cuándo se rajó la Campana Gorda de Toledo?
La tradición sostiene que, pasados dos meses desde que la campana fue instalada, mientras se tocaba para la festividad de Santa Leocadia, la campana se rajó debido a un error de aleaciones de los metales.
Aunque, sobre su rotura, se ha escrito mucho. Mercedes Alonso, en su libro “Campanas de la Catedral de Toledo”, recoge que: “En 1862 el barón Charles Davillier estuvo en nuestro país; en su Viaje por España, le dedica las siguientes líneas a la campana: el sacristán nos arrancó de nuestra contemplación para hacernos admirar la campana gorda, que pesa cerca de veinte mil kilos.
Ya habíamos oíodo doblar a esta enorme campana, que tiene el sonido cascado. Parece ser que esto ocurre desde hace mucho tiempo, pues se rajó el primer día que la usaron.
Este accidente ocurrió, según se dice, porque el badajo era de bronce. Nos enseñaron, en efecto, este badajo, que han dejado en el suelo, al lado de la campana”.
¿Puede visitarse, actualmente, la campana?
¡Sí! Una vez se saca el ticket de entrada a la Catedral, podemos solicitar el ticket de subida a la torre para la visita a la campana.
El ticket de Catedral + Campana Gorda cuesta 12,5€.
El horario de subida a la torre para visitar la campana es limitado. ¡Muy recomendable subir a visitarla!
¿Hay más campanas en la Catedral de Toledo?
¡Sí! Además, cada una tiene su propio nombre:
- La “Campana de la Encarnación”, del siglo XIX.
- “La Calderona”, la más antigua, fundida en tiempos de los Reyes Católicos.
- La “Campana de San Juan”, del siglo XVII.
- La “Campana de San Joaquín y Santa Leocadia”, del siglo XVIII.
- La “Campana de la Ascensión”, del siglo XVI.
- La “Campana de san Ildefonso”, fundida en tiempos de Carlos III.
- La “Campana de la Resurrección”, realizada en tiempos del Arzobispo Juan Tavera y durante el reinado de Carlos I.
- La “Campana del Ángel”, del siglo XVII.
¿A que no conocías que, la Catedral de Toledo, tenía tantas campanas en su torre? ¡Un dato muy curioso!
¿Cuántas curiosidades, de las aquí contadas, conocías? Estamos seguro de que alguna… ¡Se te ha escapado!